Filmado en una cabaña en medio de un bosque, durante casi 24 horas de rodaje y bajo la dirección del prestigiado David Ruiz “Leche”, el video de “No te preocupes por mí” podría definirse como una ´pequeña película´, ya que en tan sólo unos minutos nos ofrece una historia que aunque a simple vista parece sencilla, en realidad nos lleva a experimentar muchos tipos de emociones: desde la tristeza y la frustración, hasta la valentía y entereza. En él Edith Márquez luce muy natural, muy actual y juvenil, tal cual es en la vida real; sin embargo, sorprende la fuerza que tiene al interpretar la canción, así como la sensación de entereza que nos transmite.
La trama transcurre en una cabaña casi vacía, donde se intuye la protagonista vivió una gran historia de amor que de pronto concluye… Él ya se ha marchado y ella está por cerrar este difícil capítulo en su vida. Mientras termina de empacar su ropa, adornos, recuerdos, alegrías y tristezas, su mente vuela hacia diferentes momentos de la relación.
Edith canta nostálgicamente mientras su vista se pierde a través de la ventana llena de gotas de agua. Ha terminado de empacar todo, ha terminado de sacudirse lo que la ataba, es momento de reconstruirse, de recuperarse, de sobreponerse. Coloca sus cajas en su coche, pero antes de arrancar y tomar un nuevo camino, decide realmente poner punto final a lo que representó esta relación en su vida… Derrama combustible en la cabaña y enciende un cerillo. Todo se acaba, ella está superando una traición y terminando con un doloroso pasado, para de sus cenizas volver a resurgir con valentía.
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